El embarazo es uno de los períodos más importantes en la vida de toda mujer. Durante los nueve meses que dura el embarazo es recomendable mantener una dieta balanceada, donde se encuentren presentes alimentos ricos en Ácido Fólico, Calcio, Hierro y proteínas. Sin embargo, existe otra parte fundamental en la alimentación de las embarazadas y es la que proporciona elasticidad a los tejidos.
Una buena dieta que incluya Vitaminas A, Vitamina E, Vitamina C y minerales como el Zinc, mantendrá una salud adecuada de la piel durante el embarazo. Evitar estrías, manchas y procedimientos dolorosos como la episiotomía son varios de los beneficios que aportan estos nutrientes.
La episiotomía es un procedimiento que se aplica en el 90 % de los partos en España, siendo las embarazadas primerizas las que mayormente pasan por este procedimiento quirúrgico. Este procedimiento consiste en realizar un corte controlado sobre la zona del perineo para evitar desgarramientos y facilitar la salida del bebé de la vagina. La Organización Mundial de la Salud ya se ha pronunciado sobre el tema, declarando como innecesario la mayoría de procedimientos de episiotomía. Sin embargo, el procedimiento queda a criterio del médico tratante, el cual determinará la elasticidad del tejido perianal y los posibles riesgos de desgarramiento.
Mantener una elasticidad adecuada de los tejidos antes del parto es posible mediante ejercicios, masajes perianales y una buena alimentación. Esta alimentación debe ser rica en Vitaminas A, Vitamina E, Vitamina C y Zinc, las cuales brindan las siguientes propiedades:
Vitamina A: un poderoso antioxidante que restaura el brillo y salud de la piel.
Vitamina E: una de las principales vitaminas que previenen la aparición de estrías y reparan las células dañadas.
Vitamina C: maravilloso antioxidante que mantiene y cuida las células de la piel e incentiva la producción de células nuevas.
Zinc: es un nutriente que hace propicia la formación de colágeno y mejora de forma significativa la apariencia de la piel.
Si ya has pasado por una episiotomía, esta suele ocasionar pequeñas molestias durante los primeros días. El dolor perineal y la dispareunia (dolor durante el coito) son molestias frecuentes luego del parto y la episiotomía. Esta sensibilidad y molestia posparto puede ser tratada mediante masajes y terapias realizadas por ti misma en la comodidad de tu hogar.
Un accesorio ideal para realizar estas terapias son los dilatadores vaginales, los cuales restaurarán y acondicionarán el canal vaginal hasta llevarlo a la normalidad. Los dilatadores vaginales son de fácil uso. Su empleo e introducción de tan solo unos minutos, durante varias semanas, bastará para restaurar la zona vaginal a su estado inicial.